Soy Teresa Pérez de Madrid, decoradora de interiores desde hace 17 años.
Me gradué en Derecho y trabajé en Landwell (PriceWaterhouseCoopers). Me dedico profesionalmente a la decoración por una de esas “misteriosas” circunstancias que nos pone la vida: la enfermedad de mi tercer hijo me obligó a dejar el trabajo y empezar de nuevo. Empecé así a formarme en decoración, interiorismo, iluminación y estilismo.
Como tantos de vosotros, siempre me gustó la decoración; me encanta estar rodeada de cosas bonitas. La belleza es algo que me cautiva y desde pequeña intuía qué espacios me hacían sentir bien y cuáles no. Con el tiempo he comprendido que se pueden crear espacios únicos e irrepetibles para cada uno de nosotros. No a todos nos gustan las mismas cosas, no todos necesitamos lo mismo, y esto es precisamente lo que yo he aprendido a trabajar en mis espacios: primero entender qué quiere mi cliente -que muchas veces no sabemos a priori lo que queremos- y segundo, qué necesita mi cliente -cuestión que no siempre tenemos clara pues, la mayoría de las veces, no sabemos qué es realmente lo que necesitamos-.
Desde 2015 soy consultora de Feng Shui en la Escuela Europea de Feng Shui, otro regalo de la vida que me llega por mi “escepticismo”. Me apunté a mi primer curso de Feng Shui sin creerme, de verdad os lo digo, ni una sola palabra sobre las energías, el CHI o las buenas vibraciones, es más, ¡es que me daba la risa! Cuando salí de ese curso, supe que quería aprender esa técnica milenaria tan fascinante; si había una posibilidad de generar espacios con más armonía, más equilibrados y con efectos más beneficiosos para mí y para todos los que me conozcan, yo quería investigarlo.
El resultado no ha podido ser más increíble: mis proyectos nunca son lo que yo quiero, ni tampoco lo que quiere mi cliente, son un híbrido maravilloso fruto de la puesta en común de ambas partes y de lo que pide el espacio y la persona o la familia que tengo delante. Cada proyecto es ocasión de mejorar una casa, una vida y, normalmente, de generar relaciones que perduran en el tiempo ¡Cómo no me va a encantar mi trabajo!
Teresa acaba de hacernos la reforma de nuestro nuevo hogar, un ático en Pozuelo de hace 30 años, que es ahora preciosísimo, moderno, novedoso y a la vez acogedor… Todo con un gusto excepcional. Desde el principio, en esta historia nada fácil, lo mejor ha sido la alegría con la que Teresa ha trabajado en todo momento y que nos contagiaba a pesar de las dificultades que iban surgiendo, eso y la profesionalidad con que respondía a todas ellas. Siempre con su inagotable creatividad, su rapidez en la visión conjunta de las cosas, el cuidado que pone en todos los detalles, la pasión con la que trabaja y, sobre todo, con su disponibilidad total en absolutamente todo momento. ¡Muchísimas gracias Teresa por todo lo que nos has ayudado para que hoy podamos estar disfrutando de esta casa!
¿Qué es la felicidad? A veces la buscamos en sitios exóticos y aventuras extraordinarias fugaces y estamos siempre soñando con ello. Sin embargo, para mí la felicidad son momentos de mi vida diaria que disfruto de un modo muy especial por la normalidad y al mismo tiempo extraordinario que es: un desayuno maravilloso con mis hijos y mi marido en una cocina inundada por una luz especial que la llenan de tranquilidad, una charla relajada con mis amigos en torno a una chimenea que te hipnotiza en combinación de colores cálidos de sofás y cojines o mi momento de lectura sólo para mí en un rincón muy especial del salón. Estos son los que yo llamo “momento felicidad” que, además, cuando lo estoy disfrutando, lo explícito a mis acompañantes. Teresa, al decorar mi hogar, lo que ha hecho posible es llenarla de rincones maravillosos para vivir esos “momentos felicidad”. Su creatividad, su equilibrio en la decoración y fusión de sus ideas con tus deseos hacen que todo sea una sorpresa constante que supera tus expectativas.
Mi nombre es Belén, vivo en una casa grande y ya le tocaban reformas. El gusto de Teresa siempre me ha atraído, hace muchos años le encargué la reforma del baño principal. Yo no elegí nada, lo dejé a su gusto y sabía que iba a quedar precioso. Así fue, y me entraron las ganas de cambiar toda la casa, pero como económicamente no podía, he ido por partes. Después me hizo el salón, la entrada y pasillo y, la verdad, da un toque de frescura y modernidad a la casa que estoy encantada. Lo siguiente que le encargué fue la cocina, el office y el baño y esta reforma ha quedado espectacular, todo el mundo que viene a casa se queda asombrada. Ahora ya estoy ahorrando para cambiar más cosas en casa, yo tengo varias ideas que luego Teresa con su creatividad y profesionalidad me cambia tranquilamente. Es lo mejor que he hecho, mi casa es un lugar cómodo, bonito y donde me siento muy a gusto.
El trabajo de Teresa habla de sentimientos, de experiencias, de emociones. Teresa sabe interpretar los espacios y adaptarlos a tu manera de ser, de pensar y de vivir. La disposición de los elementos y la elección de sus materiales, colores y texturas se conjugan de manera armónica al servicio de tu comodidad y de la mejora de tu experiencia de vida. Yo recomiendo entusiastamente su trabajo. Deja que te conozca, te interprete y te sorprenda
Cuando conocí a Teresa, lo primero que me gustó fue la pasión que siente por su trabajo y la manera en que lo transmite. Cuando le pedí que me ayudara a montar mi oficina, cada una de sus recomendaciones resultó realmente armónica, funcional, equilibrada y proporcionada. Incluso le llegué a decir que era: “la mujer que le susurraba a los espacios”, los conoce, los percibe y los entiende. El resultado es simplemente hermoso y profundamente acogedor.